Frankfurt se ilumina colorida: la iluminación del Ramadán como un signo de diversidad
Frankfurt se ilumina colorida: la iluminación del Ramadán como un signo de diversidad
En Frankfurt, un nuevo concepto de iluminación durante el Ramadán asegura discusiones animadas en la ciudad. La brillante inscripción "Happy Ramadan" sobre el FreßGass "activa las reacciones positivas y críticas de la población y muestra el área de tensión entre aceptación y tradición.
¿Un signo de integración o una señal controvertida?
Las letras "Happy Ramadan" es mucho más que una simple decoración para las zonas urbanas. Si bien muchos residentes y transeúntes, por considerar esta iluminación como una señal de aprecio necesaria y aceptando por los aproximadamente 120,000 musulmanes en Frankfurt, también hay voces críticas que se preguntan si una señal de un lado no está establecido aquí.
Reacciones de la política
En abril de este año, el grupo parlamentario de CDU hizo una investigación al magistrado en el Ayuntamiento para aclarar si otras comunidades religiosas en la ciudad también deberían ser reconocidas de manera similar. Esta pregunta plantea un punto central: ¿no deberían todas las doce comunidades religiosas vivir en Frankfurt, la oportunidad de volverse visibles en el espacio público? La discusión sobre la igualdad de oportunidades entre las comunidades de fe muestra los desafíos en una sociedad cada vez más pluralista.
La vista del gobierno de la ciudad
El magistrado muestra en su respuesta que ya hay diálogos y cooperación con varias comunidades religiosas. El apoyo de la vida judía en la ciudad está particularmente enfatizada por los recursos financieros, un paso que podría servir como modelo para la apreciación de todas las religiones. Sin embargo, también se observa que el deseo de iluminación u otras apreciaciones públicas no se une entre las comunidades religiosas. Muchas comunidades más pequeñas a menudo tienen recursos limitados y apoyo financiero.
Financiamiento e igualdad de tratamiento
La iluminación para el Ramadán le costó al magistrado un total de 75,000 euros, una cantidad que incluye la compra de los materiales y los costos operativos. Se señala que las participaciones financieras futuras siguen siendo inciertas, ya que no todas las comunidades religiosas de la ciudad tienen oportunidades financieras para participar en dichos proyectos.
Una súplica de diversidad
En conclusión, el magistrado declara que ve su deber democrático de abordar a los diversos grupos sociales en igualdad de condiciones. En una ciudad como Frankfurt, que se caracteriza por su diversidad, se debe alentar una visibilidad apropiada de los diversos entornos de vida religiosa y cultural. Esta iniciativa podría verse como un paso hacia una sociedad integradora en la que se escuchan y respetan todas las voces.- nag