Ralf Dammasch y Sylvia Schiefer: lucha contra el desperdicio de alimentos
Ralf Dammasch y Sylvia Schiefer: lucha contra el desperdicio de alimentos
Ralf Dammasch, conocido por los populares formatos VOX "AB en la cama" y "Die Beet Brothers", utiliza una herramienta innovadora para reducir el desperdicio de alimentos en su hogar junto con su compañera Sylvia Schiefer. La oficina del distrito informó recientemente sobre su compromiso en un nuevo proyecto que promueve soluciones ecológicas.
En Dammasch y Schiefer, que viven en Bitz y recientemente adquirieron una fábrica textil en Jungingen en The Killertal, se trata del tema de la sostenibilidad. Juntos apoyan el proyecto emergente "Smartfood Bawü", que tiene como objetivo promover el manejo consciente de los alimentos y reducir los desechos.
tecnología innovadora para evitar residuos
Un elemento central de este proyecto es una escala de alto rendimiento que la pareja usa junto con una aplicación fácil de usar. La escala le permite documentar qué alimentos no se consume, sino que se eliminan. No son los únicos, porque muchos participantes en el distrito de Zollernalb también registrarán sus cantidades de desechos.
Este proyecto piloto, que comienza en la próxima semana, tiene como objetivo obtener una imagen completa del comportamiento alimentario del hogar. "Cocinamos frescos todos los días y solo compramos las porciones requeridas. A pesar de este procedimiento práctico, a menudo tenemos la sensación de que hacemos poco", explica Dammasch. La documentación debe aclarar si este sentimiento de realidad es.
Durante un período de un año, los datos del desperdicio de alimentos se recopilarán y evaluarán. Con esta medida, los dos socios esperan un "aspecto realista" para sus hábitos de consumo y desechos. La aplicación también le proporcionará información sobre cómo puede optimizar su manejo personal de alimentos.
Muchos años de experiencia en documentación
Sylvia Schiefer aporta una valiosa experiencia en el procesamiento de datos. Durante más de diez años, ha registrado meticulosamente sus compras para un instituto de investigación de mercado. "El hábito de documentar todo viene con el tiempo. Después de un tiempo, se convierte en rutina", revela el hombre de 44 años. Esta disciplina también debe ser útil en el proyecto SmartFood para generar números precisos que sirven como base para estrategias futuras para evitar el desperdicio.
El proyecto "Smartfood Bawü" es un proyecto conjunto que se realiza en varias instituciones, incluida la Universidad Albstadt-Sigmaringen y la Iniciativa de Transferencia de Tecnología en la Universidad de Stuttgart. Es la primera vez que en colaboración con numerosos ciudadanos durante un período de tiempo más largo, el desperdicio de alimentos en los hogares privados se registra sistemáticamente.
Según los datos recopilados, se desarrolla un concepto para reducir el desperdicio de alimentos en Baden-Württemberg. Tales proyectos son cruciales para crear una mejor conciencia de la nutrición sostenible y reducir los efectos en el medio ambiente.
Se puede encontrar más información sobre el proyecto en el sitio web www.smartfoodbawue.de. Aquí puede leer los pasos individuales del proyecto y encontrar consejos y trucos sobre cómo todos pueden contribuir a la reducción del desperdicio de alimentos.
Un paso en la dirección correcta
El compromiso de Ralf Dammasch y Sylvia Schiefer no solo es una contribución personal al mantenimiento ambiental, sino también un ejemplo para muchos, cómo los esfuerzos individuales también pueden causar grandes cambios. La combinación de monitoreo y selección consciente de compras puede conducir a una mejor comprensión de su propia producción de residuos y, por lo tanto, allane el camino hacia un estilo de vida más sostenible.
El proyecto Smartfood Bawü es una respuesta al problema generalizado del desperdicio de alimentos en Alemania. Según un estudio del Ministerio Federal de Alimentos y Agricultura (BMEL) desde 2020, alrededor de 11 millones de toneladas de alimentos se tiran en Alemania, con más de la mitad de estos desechos creados en hogares privados. Este no es solo un problema ecológico, sino también una económica considerable. Los recursos valiosos que se gastan en producción, transporte y almacenamiento de estos alimentos se pierden en la eliminación. El Proyecto Smart Food tiene como objetivo comprender y cambiar este comportamiento.
En el curso del proyecto, la escala de alto rendimiento de Dammasch y Schiefer desempeñará un papel importante. Permite que los datos precisos recopilen la cantidad y el tipo de alimento desechados. Estos datos son cruciales para reconocer las tendencias y desarrollar medidas específicas para evitar los desechos. Un enfoque especial es no solo ayudar a los participantes con la documentación de su desperdicio de alimentos, sino también mostrar dónde los cambios en las compras o los hábitos de cocción pueden reducir el desperdicio.
Investigación y desarrollo en el campo del desperdicio de alimentos
La investigación sobre el desperdicio de alimentos ha aumentado en importancia en los últimos años. Los estudios muestran que la educación y la sensibilización son cruciales para el tema para aumentar la conciencia de los consumidores. En sus campañas, la WWF recomienda difundir información específica sobre la reducción de los residuos de alimentos. Esto incluye consejos para una mejor planificación de comidas, almacenamiento adecuado de alimentos y recetas creativas para usar restos. El proyecto SmartFood es un paso en esta dirección y, junto con los datos recopilados, se ofrecen talleres o eventos de información específicos para ayudar a las personas a reducir el desperdicio de alimentos.
El papel de la tecnología en la evitación de residuos
La integración de la tecnología en la vida cotidiana para apoyar la evitación de residuos tiene un aumento. Las aplicaciones que admiten a los usuarios a realizar sus compras, así como plataformas que comparten excedentes de alimentos entre vecinos o tiendas, ganan popularidad. El proyecto SmartFood Bawü utiliza estas tecnologías para simplificar la adquisición de datos y aumentar la participación del usuario. A través de tales iniciativas, los ciudadanos pueden involucrar activamente el problema del desperdicio de alimentos y desarrollar soluciones juntas.
Además, la cooperación entre universidades y municipios es un aspecto central del proyecto. Estas asociaciones promueven la transferencia de conocimiento y permiten una visión holística del tema. Los resultados de estos proyectos podrían servir como modelo para iniciativas similares en otros estados federales para crear una conciencia nacional de la necesidad de reducir el desperdicio de alimentos.
Finalmente, se puede decir que el compromiso de Ralf Dammasch y Sylvia Schiefer no solo contribuye a reducir el desperdicio de alimentos en su propio hogar como parte de Smartfood Bawü, sino que también podría actuar como un catalizador para un movimiento más amplio contra el desperdicio en la sociedad. Esperemos que los datos y las ideas registradas no solo mejoren su propio manejo de alimentos, sino que también inspire a otros a consumir de manera más consciente.