Hensoldt en Fürstenfeldbruck: ¡Tecnología de última generación contra el peligro de los drones!
Hensoldt está desarrollando sistemas avanzados de defensa con drones para los aeropuertos de Fürstenfeldbruck para minimizar los riesgos de seguridad.

Hensoldt en Fürstenfeldbruck: ¡Tecnología de última generación contra el peligro de los drones!
En Fürstenfeldbruck, no lejos de Munich, personas dedicadas de la empresa Hensoldt trabajan en soluciones de defensa con drones. Recientemente, la demanda de dichas tecnologías ha aumentado notablemente, particularmente después de incidentes que comprometieron la infraestructura crítica. Recientemente, el aeropuerto de Múnich tuvo que cerrarse dos veces debido a avistamientos de drones, lo que subraya la urgencia de dichos sistemas. Por ello, Hensoldt ha reunido un equipo de unos 70 especialistas para desarrollar tecnologías que puedan detectar, identificar y neutralizar de forma segura los drones sin recurrir a medios militares como cañones o misiles. Esto informa Mercurio.
"Nos basamos en una combinación de sensores y efectores", explica Christian Jäger, jefe de reconocimiento y protección de Hensoldt. La tecnología combina varios sensores como radares y cámaras que detectan drones con efectores como drones de red y sistemas electrónicos de interferencia utilizados para combatir estos aviones. Sin embargo, la interacción de estos distintos componentes y la identificación precisa de los drones sigue siendo un gran desafío. Las pruebas no se realizan en la sede de Fürstenfeldbruck, sino en un área cercana donde se realizan manifestaciones para los clientes, principalmente militares y policías.
Posibles usos versátiles de la tecnología.
Hensoldt ofrece soluciones a medida para diferentes áreas de aplicación, ya sea para eventos, instalaciones militares o la protección de infraestructuras aeroportuarias. Incluso los aeropuertos pequeños, como el de Memmingen, están protegidos con un presupuesto de unos diez millones de euros. Los beneficios de estos sistemas se vuelven aún más claros si se considera que la disponibilidad y la facilidad de uso de los pequeños sistemas de aeronaves no tripuladas (sUAS) han aumentado significativamente en los últimos años. Estos drones pueden representar una amenaza en varios escenarios, ya sea espionaje, vandalismo o incluso ataques terroristas.
Por lo tanto, un sistema de defensa con drones altamente moderno requiere un concepto potente y modular que no se base en un único sensor o efector, sino que utilice una mezcla inteligente. Hensoldt sigue exactamente este enfoque con su solución Elysion C-UAS: esta solución modular está diseñada para detectar, identificar y defenderse contra sUAS en una amplia gama de escenarios operativos, como muestra la exposición en el sitio web de la empresa. hensoldt.
Tendencias y desafíos globales
Sin embargo, el problema no se limita a Alemania. Expertos de todo el mundo identifican tres pasos esenciales para proteger los aeropuertos de los drones: detectar, decidir e intervenir. El Centro Aeroespacial Alemán (DLR) está trabajando activamente para conectar estos pasos y desarrollar tecnologías que implementarán sistemas de detección automatizados cerca de los aeropuertos. Sin embargo, actualmente muchos aeropuertos alemanes dependen a menudo de observaciones aleatorias, lo que dificulta considerablemente la protección. Tecnológicamente sería posible instalar sensores en los aeropuertos que recopilen y analicen datos mediante inteligencia artificial BR.
En la práctica, algunas organizaciones militares ya están utilizando este tipo de tecnologías para proteger sus ubicaciones. Sin embargo, los aeropuertos civiles normalmente no pueden derribar drones para evitar posibles peligros para las personas en tierra. En cambio, se están investigando soluciones innovadoras que alteran la electrónica de los drones y hacen que aterricen de forma controlada.
Como muestran los proyectos actuales, el necesario intercambio de conocimientos en el panorama de la seguridad es de suma importancia: una de las razones por las que el DLR y otras instituciones continúan trabajando en el desarrollo de medidas progresivas. A nivel mundial, el aeropuerto de Changi en Singapur sigue siendo un modelo por haber establecido una solución eficaz para evitar las operaciones de drones en las proximidades de su tráfico aéreo con una zona de exclusión aérea de cinco kilómetros de ancho y un centro de control tripulado 24 horas al día, 7 días a la semana.