Kretschmann en Estrasburgo: ¡Juntos somos fuertes en el corazón de Europa!
En Estrasburgo, el Primer Ministro Kretschmann promueve la cooperación franco-alemana y destaca la importancia geopolítica y la innovación.

Kretschmann en Estrasburgo: ¡Juntos somos fuertes en el corazón de Europa!
El Primer Ministro Winfried Kretschmann está causando sensación en Estrasburgo. En su viaje de tres días aboga firmemente por una cooperación más intensa entre Alemania y Francia. "Sólo juntos podremos sobrevivir en la competencia mundial", afirma Kretschmann. Destaca la importancia de esta cooperación para el destino de Europa.
El programa también incluye una visita al Centro Europeo de Investigación Cuántica de la Universidad de Estrasburgo. Kretschmann destaca el papel de la investigación y la innovación para superar los desafíos de nuestro tiempo. Durante sus 15 años de mandato, el Primer Ministro visitó Suiza diez veces y Francia nueve veces, lo que ilustra la importancia de estos países vecinos para Baden-Württemberg.
Economía y viajeros transfronterizos
Francia no es sólo un socio central de Baden-Württemberg, sino también un importante socio comercial. En 2024, Francia importó bienes del Estado federal por valor de casi 18 mil millones de euros. La frontera con Francia se extiende a lo largo de unos 180 kilómetros, lo que la convierte en la más larga de Baden-Württemberg. Alrededor de 60.000 personas viajan cada día desde el Estado alemán a Suiza, un signo de la estrecha integración de ambos países.
Kretschmann destaca la necesidad de organizar eficientemente la cooperación transfronteriza. Las conversaciones durante su viaje no sólo deberán abordar temas económicos, sino también aspectos culturales. La visita al monumento conmemorativo Hartmannswillerkopf simboliza la dimensión histórica de las relaciones entre Alemania y Francia.
Conexiones históricas
Las relaciones franco-alemanas tienen una historia agitada, marcada por conflictos y reconciliaciones. Después de la Segunda Guerra Mundial, se superó la rivalidad feudal, también conocida como “enemistad hereditaria germano-francesa”. Hoy en día, ambos países son vistos como la fuerza impulsora de la integración europea, incluso si persisten diferencias en política exterior y de seguridad. El Tratado del Elíseo de 1963 y el Tratado de Aquisgrán de 2019 son hitos que consolidan institucionalmente la cooperación.
Kretschmann aprovecha su visita para promover aún más las sinergias culturales e industriales. También habla de temas de actualidad como la industria de defensa, la aeroespacial y sus conexiones con la inteligencia artificial y la investigación cuántica.
Queda por ver si este será el último viaje de Kretschmann como jefe de gobierno de esta forma. Ya ha anunciado que no se presentará a las elecciones regionales de marzo de 2026. Sin embargo, su compromiso con las relaciones franco-alemanas y la cooperación europea pasará a los libros de historia.
Para muchos habitantes de la región los acontecimientos del viaje de Kretschmann son de gran importancia. “Aquí está pasando algo”, se podría decir, porque la estrecha proximidad entre Alemania y Francia se refleja no sólo en la economía, sino también en la vida cotidiana de los ciudadanos. Las conexiones que es necesario fortalecer son complejas y se remontan a lo más profundo del pasado.
Para obtener más información sobre el desarrollo histórico de las relaciones franco-alemanas, visite el artículo sobre Wikipedia.