Bisabuelo Leonhard: ¡A los 60 años se convirtió en una estrella de las carreras en Esting!
Leonhard Oswald, de 60 años, de Esting, descubrió su pasión por las carreras de telenovelas y ha ganado 31 de 58 carreras desde 2025.

Bisabuelo Leonhard: ¡A los 60 años se convirtió en una estrella de las carreras en Esting!
Cuando Leonhard Oswald, de 60 años, de Esting, se desliza por las empinadas pendientes en su elegante modelo de carreras, no sólo los trofeos que ha coleccionado hasta ahora son un signo de su éxito, sino también su pasión por un deporte que sólo se apoderó de él en la segunda mitad de su vida. Informes de mercurio, que desde su entrada en el mundo de las carreras de telenovelas, Oswald ha participado en competiciones 58 veces y ha logrado con orgullo 31 victorias. Su entusiasmo por las carreras sólo comenzó cuando su nieto mostró interés en este pasatiempo en particular.
La historia de la jabonera se remonta a 1904 en Oberursel, donde los niños construyeron sus propios coches de carreras creativos inspirándose en la primera carrera automovilística infantil. Estas primeras "cajas de jabón", como pronto se las llamó, rápidamente se establecieron como juguetes populares para los niños. El término en sí surgió en 1933, cuando una empresa de jabón estadounidense dio a su embalaje la forma de un coche para niños, lo que dio lugar al término "jabonera". De nuevo Asociación Soapbox Baden-Württemberg Como se explicó, la primera gran carrera de tribunas tuvo lugar en Dayton, Ohio, en 1933; así comenzó una historia de éxito que continúa hasta el día de hoy.
Tecnología y creatividad
Las tribunas de Oswald son verdaderas obras maestras de la ingeniería. Invirtió mucho esfuerzo y amor durante un año y medio para construir un modelo competitivo. Equipados con suspensión independiente, frenos de disco y amortiguadores, los vehículos de construcción propia garantizan una experiencia de conducción segura y emocionante. A velocidades de 70 a 90 km/h participa en carreras que tienen lugar en lugares pintorescos y ofrecen la oportunidad de conocer a personas con ideas afines.
Uno de los desafíos que experimentó Oswald fue un accidente durante una carrera en el que se dañó su tribuna. Estas experiencias reflejan los riesgos del deporte. A pesar de estos contratiempos, su entusiasmo sigue intacto, y la alegría de coleccionar trofeos es también motivo de alegría para sus nietos.
Tesoros escondidos de las tribunas
Las tribunas no son simples vehículos; son una expresión de creatividad y diseño resistente a la intemperie. Estos pequeños vehículos de cuatro ruedas y sin motor se mueven exclusivamente cuesta abajo y, a menudo, son una obra de arte que no debe subestimarse. Las pistas de carreras en las que se utilizan suelen tener entre 250 y 500 metros y requieren una ligera pendiente para que las tribunas puedan rodar correctamente. Las normas de seguridad, que exigen, entre otras cosas, cascos y frenos funcionales, garantizan que los participantes en la carrera lleguen sanos y salvos a la meta. Wikipedia proporciona Más información sobre la faceta más emocionante de la historia de las tribunas y su evolución hasta las divertidas carreras de tribunas de hoy en día, que son cada vez más populares.
Leonhard Oswald, que también es bisabuelo, no sólo piensa en su carrera como piloto, sino también en construir algún día una tribuna para su bisnieto. Una preciosa actuación que muestra el contagioso entusiasmo por una afición que une a personas de todas las edades. Quién sabe, ¡tal vez inspire a la próxima generación a disfrutar del trepidante mundo de las carreras de telenovelas!