Rescate de moros en Baviera: los agricultores se muestran escépticos ante la rehumidificación
En Günzburg, un agricultor muestra los desafíos y oportunidades que supone la rehumidificación de los páramos para la protección del clima.

Rescate de moros en Baviera: los agricultores se muestran escépticos ante la rehumidificación
¿Qué está pasando en el páramo? En el debate sobre la protección del clima, la rehumidificación de los páramos está en el orden del día no sólo en Baviera, sino también en toda Alemania. Sin embargo, desde la introducción en diciembre de 2023 del Programa de agricultores de páramos de Baviera, que promueve la rehumidificación de las zonas de páramos, ha habido poca respuesta positiva por parte de los agricultores. La bonificación de financiación de 2.200 euros por hectárea al año durante doce años puede parecer tentadora, pero hasta ahora ningún agricultor ha mostrado interés en participar, como informa br.de.
"cuanto más húmedo, mejor" es el lema de los protectores de páramos y se refiere a los amplios efectos positivos de la rehumectación. Este proceso puede reducir las emisiones de CO2 en más de un 80 por ciento, lo que no debe subestimarse en tiempos de cambio climático. Sin embargo, existen importantes preocupaciones entre los agricultores, particularmente con respecto a la competencia por la tierra que conlleva la rehumidificación. Los estudiantes de agricultura de Kaufbeuren tampoco muestran interés: la necesidad de tierra para la agricultura intensiva es sencillamente demasiado grande.
Protección del clima y agricultura en conflicto
Un hecho amargo: las turberas drenadas liberan grandes cantidades de gases de efecto invernadero, lo que intensifica el debate actual sobre los objetivos climáticos. Más precisamente, una hectárea de páramo drenado emite anualmente gases de efecto invernadero que equivalen al consumo anual de seis habitantes medios de Baviera. Sin embargo, las turberas pierden sustancia - hasta 4 cm de suelo al año - y se prevé que el 25% de las turberas utilizadas agrícolamente en Baviera podrían quedar inutilizables en sólo 15 años.
Annette Freibauer, de la LfL, destaca que los procesos del programa son atractivos, pero es necesario practicarlos para lograr un mayor impacto. ¿Pero qué detiene a los agricultores? Según Jochen Krauß, un agricultor de Gunzburgo que desde 2019 rehumedece superficies, las altas exigencias y cuestiones de responsabilidad poco claras impiden la inscripción en el programa. Es necesario un informe hidrológico y la carga burocrática parece disuadir a mucha gente.
Páramos húmedos como almacenamiento de carbono
Las turberas no sólo son puntos críticos para la protección del clima, sino también importantes depósitos de carbono. Almacenan más carbono que todos los bosques del mundo juntos. En Alemania, gran parte de estos páramos han sido drenados, lo que ha provocado la liberación del carbono almacenado. Por lo tanto, los páramos deben regarse hasta justo por debajo del nivel del suelo para mantener su función de almacenamiento de carbono. Pero existen desafíos: para que la rehumectación sea financieramente viable, se necesitan nuevos canales de comercialización para los productos de la paludicultura, aunque estos normalmente produzcan menores rendimientos.
Es aún más importante que se difundan enfoques innovadores, como los de la comunidad energética de Malchin. Aquí se cosechan tallos de praderas húmedas y se queman en una planta de calefacción para abastecer a partes de la ciudad con calor respetuoso con el clima. Estas soluciones ofrecen nuevas perspectivas, pero podrían suponer un elevado desembolso de inversión.
En resumen, la rehumidificación de las turberas es una cuestión delicada que debe equilibrar tanto los intereses agrícolas como los objetivos ambientales. El hecho es que una rehumectación exitosa requiere una extensa intervención técnica y buenas manos por parte del agricultor. Las generaciones futuras tendrán que cosechar los resultados de nuestras acciones de hoy, lo quieran o no.