¡Los estudiantes de la escuela Kinzig construyen ellos mismos bancos de descanso creativos!
El concejal Marquart elogia a los estudiantes de la escuela Kinzig por sus innovadores proyectos de bancos apoyados por el grupo de apoyo.

¡Los estudiantes de la escuela Kinzig construyen ellos mismos bancos de descanso creativos!
En la escuela Kinzig de Schlüchtern se ha desarrollado un proyecto apasionante que no sólo requiere creatividad, sino también habilidades técnicas. Jannik Marquart, concejal del distrito, estuvo presente y felicitó a los estudiantes por su excelente trabajo. Los aspirantes a carpinteros diseñaron y construyeron ellos mismos bancos con mucho esfuerzo e inventiva. ¿El objetivo? Crear más opciones de asientos para los descansos, fiel al lema: “¡Sentados juntos, intercambiando ideas mejor!”
El proyecto contó con una generosa subvención de 5.000 euros del grupo de apoyo de la escuela para cubrir los costes de material de un total de 20 bancos. "Una buena parte del dinero va directamente a los estudiantes; aquí cada euro está bien invertido", afirma Marquart. Los nuevos bancos están disponibles en dos versiones: una con asiento continuo y otra con prácticos puntales de madera. Esto significa que se ofrece la solución adecuada para cada necesidad.
Beneficios prácticos y sostenibilidad
Los estudiantes no sólo aprendieron cómo procesar la madera, sino también lo importante que es cumplir con las normas de seguridad contra incendios. "Los nuevos bancos no sólo cumplen todos los requisitos, sino que también son fáciles de limpiar y, en caso necesario, pueden cambiarse rápidamente", explica el director Karsten Günder elogiando el compromiso de los jóvenes artesanos. "Este es un verdadero proyecto de exhibición que muestra cuánta alegría puede surgir del trabajo práctico".
Estos proyectos escolares no sólo son una gran oportunidad para aprender habilidades artesanales, sino que también promueven el trabajo en equipo y las habilidades sociales. Esto es importante porque, como puedes leer en la revista Sofatutor, los profesores siempre están buscando inspiración para proyectos interdisciplinarios y entre clases. Muchas escuelas se basan en conceptos similares, ya sean empresas escolares que se centran en la sostenibilidad o proyectos creativos como formatos de podcasts y exposiciones digitales.
Un ejemplo de proyectos escolares exitosos.
El compromiso de la Escuela Kinzig es un gran ejemplo de cómo la oferta educativa en las escuelas puede fortalecer a la comunidad. Los proyectos dirigidos por estudiantes, como los del Helene-Lange-Gymnasium de Rendsburg o de la Siebengebirgsschule de Bonn, demuestran que las habilidades manuales y empresariales pueden ir de la mano y preparar a los estudiantes para la vida de una manera interesante. Puede encontrar más ejemplos de escuelas que destacan por sus proyectos innovadores en la oferta de Sofatutor, donde se recopilan ideas creativas para proyectos escolares.
La escuela Kinzig ha dejado huella con sus bancos. Aquí no sólo se hace artesanía, sino que también se fortalece la comunidad. Un proyecto que sin duda inspirará más ideas e imitadores en los próximos años escolares.