Alerta roja: ¡PFAS en cada agua potable analizada de Baja Sajonia!
En Baja Sajonia se encontraron PFAS en todas las muestras de agua potable analizadas. Se aplicarán nuevos límites a partir de 2026.

Alerta roja: ¡PFAS en cada agua potable analizada de Baja Sajonia!
Un informe alarmante de la organización de protección del medio ambiente BUND revela que se detectaron PFAS en todas las muestras de agua potable analizadas en Baja Sajonia. Estas sustancias alquílicas perfluoradas y polifluoradas se consideran nocivas para la salud y se sospecha que causan enfermedades graves como daños hepáticos y cáncer de riñón y testículo. El resultado se refiere a pruebas realizadas entre junio y octubre de 2025, detectándose PFAS en 42 muestras de 46 muestras de agua potable en todo el país. Lo que resulta especialmente preocupante es que las ocho muestras procedentes de Baja Sajonia estaban contaminadas. NDR informa que en algunas muestras los valores están incluso por encima de los futuros valores límite, que deberían estar disponibles entre 2026 y 2028.
Los PFAS se utilizan habitualmente en chaquetas repelentes al agua, revestimientos antiadherentes para sartenes y productos cosméticos. Estos productos químicos son extremadamente duraderos y, por lo tanto, a menudo se los denomina “productos químicos para siempre”. Según la EPA, muchas de estas sustancias se encuentran no sólo en el agua potable, sino también en el aire, el suelo e incluso en los seres vivos, lo que aumenta las preocupaciones del grupo ambientalista. EPA destaca que la exposición a ciertos PFAS puede estar asociada con efectos adversos para la salud en humanos y animales.
Límites y desafíos
Es importante señalar que los métodos actuales para eliminar las PFAS del agua son costosos y requieren muchos recursos. Por ello, el BUND pide la eliminación inmediata de la producción y el uso de estas sustancias en la UE. Según la información actual, las PFAS se pueden detectar en más de 1.500 lugares de Alemania. Además, menos de 20 de los más de 10.000 PFAS conocidos están regulados, lo que agrava aún más el problema. Para proteger la salud pública, es fundamental que las comunidades identifiquen y responsabilicen a los responsables de las PFAS.
Ya hay señales de mejoras en la regulación. A nivel de la UE se está debatiendo la posibilidad de restringir todo el grupo de PFAS. Esto podría conducir a medidas más estrictas para proteger el agua potable y garantizar la salud de los ciudadanos.
Un llamado a la acción
Dados los graves riesgos asociados con las PFAS, es necesario actuar. Los estudios del BUND son locales y limitados en el tiempo, pero sólo reflejan una parte de los problemas. Teniendo en cuenta los resultados de estas pruebas, está claro que ya es hora de abordar esta cuestión de manera eficaz. Se pide a las autoridades pertinentes que se tomen en serio los resultados de las pruebas y tomen medidas para reducir la contaminación por PFAS en el suministro de agua potable.
El BUND y otras organizaciones medioambientales tienen la responsabilidad de educar al público sobre los riesgos y aumentar la presión sobre los responsables políticos. La protección sostenible del agua potable sólo es posible si trabajamos juntos.