Baja Sajonia en el dilema de las emisiones: ¡coches limpios y sucios en comparación!
Lüchow-Dannenberg tiene la mayor proporción de normas de emisiones antiguas de Baja Sajonia. Un estudio arroja luz sobre las diferencias.

Baja Sajonia en el dilema de las emisiones: ¡coches limpios y sucios en comparación!
En Baja Sajonia el panorama es colorido en cuanto a los tipos de vehículos que circulan por las carreteras. Según un análisis actual de la Autoridad Federal de Transporte por Carretera (KBA), aquí se encuentran los coches más limpios y más sucios del país. Los estándares de emisiones de vehículos varían mucho y se distribuyen de manera muy diferente en los diferentes distritos de registro. La proporción de automóviles con normas de emisiones antiguas, es decir, Euro 1 a Euro 4, se sitúa entre el 10% y el 33,7%. La proporción más alta se nota especialmente en Wendland (Lüchow-Dannenberg), con un 33,7 %, seguido de Nienburg y Salzgitter, donde alrededor del 30 % de los vehículos cumplen con normas de emisiones antiguas.
En marcado contraste se encuentra Wolfsburgo, la ciudad que tiene la proporción más baja de normas de emisiones antiguas, con un 10,9%. No hay ningún otro lugar en Alemania con una relación calidad-precio aún mejor. Aquí la ciudad se beneficia especialmente de la presencia de VW, lo que genera muchas compras de coches nuevos y de empresa. Los empleados de VW también disfrutan de ofertas especiales al comprar coches nuevos, lo que explica el continuo aumento de coches nuevos. En Wolfsburgo hay nada menos que 973 coches por cada 1.000 habitantes, lo que significa que, de media, hay incluso más de un coche por adulto.
La revolución eléctrica y su difusión
Las estadísticas sobre coches eléctricos aportan otro dato interesante: Wolfsburgo también lidera con un 77,2% de vehículos con la nueva norma de emisiones Euro 6. A modo de comparación, en ciudades como Munich, Ingolstadt y Stuttgart esta proporción se sitúa sólo entre el 62,7% y el 64,8%. Esto deja claro que los ingresos de los ciudadanos tienen una influencia significativa en la compra de vehículos nuevos y respetuosos con el medio ambiente. Las zonas ricas parecen tener una buena influencia en este aspecto.
Las nuevas matriculaciones en el mercado de automóviles muestran otra tendencia: en 2025, la proporción de nuevas matriculaciones de vehículos de gasolina y diésel cayó. En mayo de 2025, sólo se matricularon recientemente el 28,4% de los vehículos de gasolina y el 14,7% de los vehículos diésel, lo que corresponde a una disminución del 24,1% y del 21,8% en comparación con el año anterior. Por el contrario, los vehículos híbridos experimentaron un aumento significativo del 38,5% y los coches eléctricos del 18%. Esto demuestra que cada vez más personas recurren a motores alternativos.
Emisiones: un problema acuciante
Pero no todo va bien, como lo demuestran los datos de la Agencia Federal de Medio Ambiente. El sector del transporte apenas ha contribuido a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. De hecho, la participación del transporte en las emisiones totales aumentó del 13% en 1990 al 22% en 2023. El transporte es responsable del 37% de las emisiones de óxido de nitrógeno y del 17% de las emisiones de partículas en Alemania. Aunque las emisiones de partículas del tráfico se han reducido en aproximadamente un 63% desde 1995, el tráfico rodado motorizado sigue siendo la principal causa de este problema del aire.
El aire en las áreas metropolitanas está muy contaminado con dióxido de nitrógeno, lo que se debe principalmente a las altas emisiones de los vehículos de camping. Queda claro que a Alemania todavía le queda un largo camino por recorrer para cumplir sus ambiciosos objetivos de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 65% para 2030 y alcanzar la neutralidad climática para 2045.
En general, esto demuestra que el desarrollo de la interacción entre automóviles, emisiones y normas de emisiones en Baja Sajonia y especialmente en Wolfsburgo puede ser innovador para toda la República Federal. La tendencia hacia nuevos motores y tecnologías que podrían mejorar la calidad del aire en el futuro sigue siendo positiva.