Atención a Kleinensiel: ¡millones invertidos para un almacenamiento provisional seguro!
BGZ invierte en instalaciones de almacenamiento provisionales independientes en Kleinensiel, garantizando el almacenamiento de residuos radiactivos hasta 2074 y promoviendo la transparencia.

Atención a Kleinensiel: ¡millones invertidos para un almacenamiento provisional seguro!
En Kleinensiel están sucediendo muchas cosas: la empresa federal de almacenamiento provisional (BGZ) tiene grandes planes para el funcionamiento de sus tres almacenes provisionales, en los que se gestionan el combustible gastado y los residuos radiactivos. Alto Norte24 BGZ está invirtiendo mucho para garantizar un almacenamiento seguro incluso después del desmantelamiento de la central nuclear desmantelada de Unterweser (KKU). El desmantelamiento comenzó en 2011 y continúa hasta el día de hoy. El objetivo a largo plazo es almacenar de forma segura barras de combustible hasta al menos 2047 y quizás incluso 2074.
Actualmente, el BGZ emplea a 35 personas, pero se espera que el número de empleados aumente hasta 45. En una conversación con el ayuntamiento de Stadland, el subdirector interino de almacenamiento, Stephan Thode, y el portavoz de prensa, Jonas Wingert, explicaron una serie de ajustes técnicos necesarios para garantizar la independencia de los almacenes provisionales de la central eléctrica. Esto incluye, entre otras cosas, la instalación de nuevos sistemas de alarma y seguridad contra incendios, así como la ampliación de las capacidades de almacenamiento.
Nuevo edificio de guardia y funciones.
Un proyecto valorado en 36 millones de euros es la construcción de un nuevo edificio funcional y de seguridad, cuya finalización está prevista para 2027. Con una superficie de 5.000 metros cuadrados, incluirá talleres, una sala de vehículos y una entrada independiente. La planificación también tiene en cuenta los conceptos energéticos más modernos: para el suministro del nuevo edificio se utiliza energía renovable procedente de una instalación fotovoltaica y una bomba de calor geotérmica. Esto demuestra que BGZ no sólo piensa en la seguridad, sino también en la sostenibilidad. NWZonline informó.
Un desafío que no debería pasarse por alto son las preocupaciones de los críticos sobre la seguridad de los diques. Sin embargo, el BGZ rechaza estas preocupaciones por considerarlas infundadas. A pesar de los contraargumentos, es importante permanecer en la discusión sobre seguridad y el diálogo con el público para construir una relación de confianza.
Transparencia y responsabilidad
En Alemania, según la Ley de Transparencia, los operadores de centrales nucleares deben adoptar medidas anuales para el desmantelamiento y el desmantelamiento de residuos radiactivos e informarlas a la Oficina Federal de Economía y Control de Exportaciones (BAFA). Es necesario indicar claramente qué recursos están actualmente disponibles para cumplir con las diversas obligaciones. BAFA garantiza que esta información se controle periódicamente y se incorpore al informe anual al Bundestag alemán.
Un desafío fundamental es la búsqueda de una instalación de almacenamiento final para los residuos radiactivos, que se prolonga a lo largo de los años. Por lo tanto, el desmantelamiento del KKU y los proyectos en curso del BGZ son de suma importancia. Esto no sólo fortalece la infraestructura local, sino que también asume parte de la responsabilidad nacional en el manejo de la energía nuclear y sus residuos.