¡Däumling pone fin a la producción de calzado en Alemania después de 75 años!

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La empresa tradicional D-Kinderschuh GmbH cierra la producción en Renania-Palatinado después de 75 años debido a dificultades económicas.

Traditionsunternehmen D-Kinderschuh GmbH schließt Produktion in Rheinland-Pfalz nach 75 Jahren wegen wirtschaftlicher Schwierigkeiten.
La empresa tradicional D-Kinderschuh GmbH cierra la producción en Renania-Palatinado después de 75 años debido a dificultades económicas.

¡Däumling pone fin a la producción de calzado en Alemania después de 75 años!

Se está escribiendo un triste capítulo en la historia del calzado alemán: D-Kinderschuh GmbH, conocida por la tradicional marca Däumling, ha dejado de producir zapatos para niños en Bruchweiler-Bierenbach después de 75 años. Los 32 empleados fueron despedidos a finales de agosto de 2025. La empresa, fundada en 1937 por Hermann Mayer como un pequeño fabricante de calzado, se enfrenta ahora a enormes dificultades económicas tras su venta al grupo Berkemann en 2022. El cierre de la fábrica en el suroeste del Palatinado está previsto para mediados de 2026, lo que representa una pérdida significativa no solo para los empleados afectados sino también para la región.

El fin de Däumling no es un caso aislado, sino parte de una tendencia más amplia. La industria alemana del calzado está bajo presión: la caída de las ventas y el aumento de los costes de producción afectan a los fabricantes establecidos. Según el Ministerio Federal de Economía y Energía, Alemania es uno de los mayores países productores de calzado de la UE, pero importa más del 40% de su calzado de Asia, especialmente de China y Vietnam. Los desafíos para los fabricantes nacionales se ven agravados por los altos costos de la energía y la compleja burocracia que hacen que la producción nacional no sea rentable.

El adiós a la artesanía

“Algo está pasando”: el fin de una empresa tradicional como Däumling es más que una simple decisión económica. Con el cierre se perderá una pieza de artesanía alemana. Däumling no era sólo una marca; también era sinónimo de calidad y fiabilidad. Desgraciadamente, los responsables descubrieron que la producción recientemente cayó por debajo de los 100 pares de zapatos infantiles al día y que costes como el aumento del salario mínimo amenazaban la supervivencia de la fábrica. En los últimos tres años, numerosos minoristas de calzado se han declarado en quiebra, lo que refleja la desesperación de la industria.

Los planes de apoyo a los empleados afectados se consideran inadecuados. Con el aumento de los costes energéticos y la situación económica generalmente tensa, el futuro de los 32 empleados restantes se vuelve sombrío. El grupo Berkemann ahora tiene que encontrar soluciones para compensar la pérdida de conocimientos y tradición, lo que representa un gran desafío dada la situación actual del mercado.

Una mirada a toda la industria

Como subraya el Ministerio Federal de Economía, toda la industria está luchando contra cambios en el comportamiento de los consumidores y mayores exigencias a la producción. El compromiso con soluciones sostenibles y digitales está en la agenda. Al mismo tiempo, el comercio minorista sigue siendo un canal de ventas importante, pero está claro que los fabricantes nacionales deben depender cada vez más de la diversificación internacional para sobrevivir en la competencia global.

En resumen, podemos decir que decir adiós a Däumling no sólo significa el cierre de una empresa, sino también la pérdida de un capítulo en la historia del calzado alemán. La tendencia a trasladar la producción al extranjero podría seguir aumentando si no se encuentran soluciones a los desafíos del sector lo antes posible. La situación deja claro una vez más que “todo lo bueno llega a su fin en algún momento”, aunque los recuerdos de Däumling y su legado seguirán presentes.