Lübeck en el punto de mira: ¿Qué tan peligrosa es la calidad del aire hoy en día?

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Descubra los parámetros actuales de calidad del aire en Lübeck, incluidos el polvo fino y el ozono, y su impacto en la salud.

Erfahren Sie die aktuellen Luftqualitätsparameter in Lübeck, einschließlich Feinstaub und Ozon, und deren Auswirkungen auf die Gesundheit.
Descubra los parámetros actuales de calidad del aire en Lübeck, incluidos el polvo fino y el ozono, y su impacto en la salud.

Lübeck en el punto de mira: ¿Qué tan peligrosa es la calidad del aire hoy en día?

¿Cuál es la calidad del aire en Colonia? Una mirada a Lübeck nos muestra de forma impresionante la importancia que ha adquirido este tema. La medición actual en Moislinger-Allee muestra lo importante que es la calidad del aire para nuestra salud. El 26 de octubre de 2025 se midieron allí partículas finas de polvo (PM10) por metro cúbico de aire. El límite legal es de 50 partículas por metro cúbico, y se puede superar un máximo de 35 veces al año, por lo que el aire se clasifica como "malo" si el valor está entre 51 y 100 partículas, ya que ln-online.de explicado.

Pero no es sólo el polvo fino lo que nos molesta. El dióxido de nitrógeno y el ozono también desempeñan un papel importante en el debate sobre la contaminación del aire. En el caso del dióxido de nitrógeno, los valores superiores a 200 μg/m³ se clasifican como “muy malos”, mientras que los valores de ozono superiores a 240 μg/m³ son igualmente preocupantes. Según las estadísticas de Roche n-ag.de, estos contaminantes se encuentran entre las principales causas de problemas de salud.

Riesgos para la salud y recomendaciones.

Los efectos de la contaminación del aire sobre la salud son indiscutibles. La Agencia Europea de Medio Ambiente estima que alrededor de 240.000 personas en la UE mueren prematuramente cada año debido al polvo fino. Esta cifra es alarmante y pone de relieve la urgencia de tomar medidas al respecto. En caso de “mala” calidad del aire, se recomienda evitar el ejercicio físico al aire libre, especialmente para personas sensibles. Con una calidad del aire “moderada”, las consecuencias para la salud a corto plazo son poco probables, aunque en este caso los grupos de riesgo en particular podrían reaccionar con mayor sensibilidad. Estas recomendaciones ayudan a minimizar la contaminación por polvo fino, como explica detalladamente eea.europa.eu.

Las condiciones climáticas, como las observadas en junio de 2025 con temperaturas entre 11 y 22 °C y vientos de hasta 25 km/h, también influyen en la concentración de contaminantes del aire. Por tanto, es importante estar atento a la situación meteorológica para evaluar mejor la calidad del aire. Sin embargo, estas sustancias peligrosas invisibles exigen mucha atención por nuestra parte.

En lo que respecta a la calidad del aire, por ejemplo, en la noche de Nochevieja, el debate actual muestra que, si bien la exposición a los fuegos artificiales provoca un aumento a corto plazo de los niveles de polvo fino, afortunadamente no es significativo en comparación con la exposición continua a lo largo del año. Sin embargo, sigue siendo crucial que estemos atentos a la evolución para lograr el objetivo de aquí a 2030: una reducción significativa de los contaminantes del aire.

Una mirada al futuro

Sin embargo, a largo plazo existe una tendencia hacia la mejora de la calidad del aire. Entre 2005 y 2022, el número de muertes en la UE debido a partículas en suspensión se redujo significativamente. La UE persigue el objetivo de reducir la contaminación por polvo fino en un 55 % hasta 2030, lo que también sería deseable para nosotros en Colonia. Sin embargo, la contaminación del aire sigue siendo el mayor riesgo para la salud ambiental en Europa y todavía queda mucho por hacer para cumplir con las directrices legales de la OMS sobre la calidad del aire en el mundo real. Es probable que los cambios en las normas de calidad del aire, que están en vigor desde el 10 de diciembre de 2024, sean un paso importante en la dirección correcta.

En resumen, la calidad del aire no es sólo un problema local, sino que afecta a todos. Depende de nosotros contribuir activamente a la mejora y utilizar nuestros recursos de forma más consciente para promover el bienestar tanto de nuestra propia salud como de nuestro entorno.