Disputa sobre el billete de Alemania: ¡los estados exigen que el gobierno federal pague!
Lörrach es el centro de atención en el contexto de la financiación del Deutschlandticket, mientras que los gobiernos federal y estatal discuten sobre apoyo y seguridad.

Disputa sobre el billete de Alemania: ¡los estados exigen que el gobierno federal pague!
La fórmula alemana vuelve a ser el centro de la discusión porque la incertidumbre sobre la financiación podría ser la ruina de la fórmula popular. Casi 13,5 millones de personas aprovechan esta oferta, que, sin embargo, conlleva un aumento de precio de 49 a 58 euros al mes. Los gobiernos federal y estatal comparten actualmente los costes anuales de 1.500 millones de euros cada uno, pero la difícil situación presupuestaria de muchos estados federados genera serias preocupaciones sobre esta base financiera. El Verlagshaus Jaumann informa de que Los Estados, en particular, exigen más seguridad en la planificación para aprobar el billete y garantizarlo más allá de 2026.
En particular, el Ministerio de Transportes de Baviera, que preside la Conferencia de Ministros de Transportes, subraya que, debido a la difícil situación presupuestaria, no pueden recaudar más de los ya mencionados 1.500 millones de euros al año. Este tema también se está convirtiendo en un tema controvertido, ya que los ministros de transporte de varios estados federados, como Brandeburgo y Baja Sajonia, exigen principalmente que el gobierno federal se haga cargo de la financiación. Así lo subrayaron el Ministro Tabbert de Brandeburgo y el Ministro Tonne de Baja Sajonia, quienes subrayaron que debería establecerse por ley un límite a las acciones estatales.
Modelo de financiación al borde del abismo
Las perspectivas de reembolso de costes en el futuro siguen siendo inciertas. La VDV (Asociación de Empresas de Transporte Alemanas) advierte que las subvenciones actuales no son suficientes. Predice que las pérdidas de la industria podrían alcanzar los 2.300 millones de euros en 2023, lo que subraya la necesidad de una planificación financiera sólida. Merkur señala también que la financiación del Deutschlandticket es decisiva para su existencia. Hasta ahora, el Ministerio Federal de Transportes ha mostrado resistencia a mayores cargas financieras para el gobierno federal.
Estas incertidumbres podrían verse exacerbadas en vista de la próxima conferencia especial de ministros de transporte prevista para el 27 de junio. A partir de entonces se decidirán nuevas medidas para financiar el billete. Si bien algunos ministros descartan ceder a una mayor contribución financiera de los estados, aumenta la presión sobre el gobierno federal para que proporcione más apoyo.
Perspectivas y desafíos futuros
El alcalde de Berlín, Kai Wegner, también expresa sus dudas y pide que el gobierno federal asuma una responsabilidad clara en la financiación del billete. Si se tiene en cuenta que desde el inicio de los viajes con Deutschlandticket ha habido numerosas discusiones, no es de extrañar que tanto los usuarios como los políticos se muestren escépticos. Estas incertidumbres no sólo podrían poner en peligro la aceptación del billete, sino también cuestionar todo el concepto de movilidad en Alemania, como informa Tagesschau.
Con la exigencia de una regulación de precios fijos hasta al menos 2028 y la posibilidad de vincular el precio de los billetes a un índice, nos enfrentamos al desafío de garantizar tanto la estabilidad económica como la facilidad de uso. En esta zona de tensión, los gobiernos estatal y federal deberán encontrar un camino común. En última instancia, redunda en beneficio de todos que el Deutschlandticket no se quede en una simple instantánea, sino que sea una oferta de movilidad a largo plazo para todos los ciudadanos.